El ex jugador, ex seleccionador nacional y entrenador de fútbol, José Antonio Camacho ha sido el encargado de pregonar la Feria Taurina de Murcia 2023 durante el transcurso de un acto que ha tenido lugar esta noche en la ciudad de Murcia organizado por el Real Club Taurino de Murcia y que sirve para dar el pistoletazo de salida a todos los actos culturales que se celebrarán de manera paralela a los festejos taurinos que se celebrarán en el coso de La Condomina durante la feria.
A lo largo de todo el pregón Camacho ha hecho gala de su gran afición por los toros y de atesorar un amplio conocimiento de la Fiesta. “Siempre he admirado el arte de torear, siempre he sentido por él un profundo respeto y siempre ha despertado en mí emociones y sentimientos que únicamente el toreo puede despertar”.
No faltó la referencia futbolística al recordar como el viejo estadio del Real Murcia y la plaza de toros de la ciudad compartían ubicación y el nombre de La Condomina, con la anécdota incluida de que, en ocasiones, los balones acababan en los corrales de la plaza. Igualmente recordó a la figura del que fuera su compañero en el Real Madrid, Juanito, con el que compartió afición y multitud de anécdotas relacionadas con el mundo del toro.
El ciezano ha hecho durante todo el pregón un recorrido por toda la liturgia del espectáculo taurino, resaltando la figura del toro como máximo exponente de la Fiesta: “El toreo tiene un rey incontestable: el toro. La Fiesta empieza y termina en el toro, todo discurre en torno a él” afirmó, subrayando que: “Cuando el torero triunfa y sale indemne de la muerte, tras poner su vida al filo de las armas del noble enemigo al que acaba de abatir tras colaborar con él y aprovechar su bravura, hacen que la muerte del toro bravo sea un acto hermoso, emocionante, heroico”
El de Cieza, aseguró ser admirador de todos los toreros: “Todo aficionado tiene su propia percepción de la tauromaquia, y no he venido a dar lecciones, pero sí sé decir como yo mismo asisto a la Fiesta. Todos los toreros son de mi gusto, los de a pie y a caballo, los de plata y los de oro. Todos se juegan la vida para darnos el toreo, la gloria, la emoción y la luz inmensa del toreo”, añadiendo que: “Admiro a todos los toreros, porque para el verdadero aficionado no caben favoritismos, ni fanatismos. Hay que ver lo que sucede en el ruedo. Allí se dan cita el miedo y el valor, el arte y la técnica, el dominio y la entrega… El torero es ese artista al que se le lleva a hombros y se le venera como a un dios pagano al que hay que rendirle el tributo de los vítores y las flores.”
Como ejemplos de su admiración, Camacho recordó nombres de toreros murcianos de la talla de Manuel Cascales Hilla, pasando por Ortega Cano, Pepín Jiménez, hasta Rafaelillo o Paco Ureña. Debido a sus vínculos con Albacete recordó las figuras de Pedrés, Dámaso González, Manuel Caballero, Sergio Serrano o Rubén Pinar. Hubo una mención especial para Pepín Liria al que el ciezano considera como un hermano.
No faltó una sincera defensa de la Tauromaquia en estos tiempos en que está siendo atacada por ciertos sectores de la sociedad: “La Fiesta no necesita más defensa que su propia grandeza, ni más historia que la que atesora, ni más brillo que el que la hace resplandecer”, a lo que añadió: “Es un error humanizar la muerte del toro, como es un error humanizar la vida de cualquier animal, cuya muerte no puede ser lamentada en paridad con la del ser humano. Sostener lo contrario es camino de poco recorrido”.
Deseoso de compartir tendido con todos los aficionados en La Condomina los próximos días, hizo un llamamiento a la afición: “Vayamos a los toros sin complejos, asentados en nuestra afición. Afición que compartimos con artistas de otras disciplinas. Los tendidos siempre se han llenado de talento, de arte y de gracia”.
Como colofón a su pregón José Antonio Camacho, tuvo palabras de agradecimiento a Murcia y Cieza: “Pertenezco a esta tierra que me ha bendecido con su acogimiento y que tantos honores me ha hecho. Así que mi gratitud no cabe en las palabras. Soy hijo agradecido a ese rincón entrañable de mi pueblo, donde por cierto alternaron juntos por primera vez Manolete y Arruza. A Cieza le debo ser ciezano, a Murcia, murciano y a España, español”.
El pregonero fue presentado por el empresario y amigo personal del ciezano, José Luis Morga Baleriola y el acto contó con la brillante actuación del Ballet Español de Murcia.
El acto ha contado con la presencia de una nutrida representación política encabezada por el presidente de la Comunidad de Murcia, Fernando López Miras, del delegado del gobierno en Murcia, Francisco Jiménez, del consejero de presidencia, Marcos Ortuño, diputados regionales, consejeros y concejales del ayuntamiento de Murcia, así como de los alcaldes de San Javier y Cieza, José Miguel Luengo y Tomás Rubio. Igualmente se ha contado con la presencia de autoridades militares, representación del Cabildo Superior de Cofradías de Murcia, Cofradías de la Semana Santa de Murcia, Agrupación Sardinera, Consejo Jurídico de la Región de Murcia, Asociación de Radio y Televisión de la Región de Murcia y 7TVRM.
