Si Juan Belmonte Luque hubiera sido torero habría terminado la noche a hombres y paseando orejas y rabo, tal fue el éxito del pregón que leyó para anunciar el inminente comienzo de la Feria Taurina de Murcia en su edición de 2014.
Empezó con versos que fueron luego salpicando las distintas referencias a su tío abuelo Juan Belmonte, «El pasmo de Triana», cuya trayectoria artística glosó; a la plaza de toros de La Condomina, que pisó por primera vez hace cerca de 30 años con un micrófono de Canal Sur; y al Club Taurino de Murcia, que elogió por su longevidad y por ser referente de la afición a los toros en la región.
El pregonero de la Feria Taurina de Murcia 2014 recordó asimismo que se cumplía ahora el primer centenario de la alternativa de su tío abuelo, de quien dijo que «transformó el toreo» o fue «el inventor del toreo moderno». También se refirió a la supuesta rivalidad que mantenía con Joselito «El Gallo», a quien le unía realmente una gran amistad; de hecho, coincidieron en 257 tardes.
Belmonte Luque leyó un pregón muy colorista en el que estuvo acompañado a la guitarra por Francisco Muñoz, alumno aventajado de Carlos Piñana, cuyos acordes pusieron el fondo a los pasajes en verso.
En sus recuerdos de Murcia no faltó la mención a Manuel González, anterior presidente del Club Taurino, «que siempre traía un trocito de Murcia a Sevilla cada Feria de Abril de Sevilla».
Además, el pregonero tuvo palabras elogiosas a la composición de los carteles de la Feria de Murcia, «donde están Ponce, el Benjamin Button del toreo, cada día más joven; Rafaelillo, el pequeño gran hombre; Manzanares y Talavante, figuras; el número uno, Juli; y Perera, el único continuador del «Ojedismo», apuntó.
Belmonte, que recoge el testigo como pregonero de Pedro Javier Cáceres o José Luis Benlloch, entre otros, recibió vítores y «oles» en dos momentos de especial lucimiento. El primero, cuando evocando a dos maestros genuinos como Curro Romero y Rafael de Paula tomó el capote para emular sus estilos en sendas tandas; el otro, que sirvió para rematar su faena, le llevó a marcarse un bailecito mientras la guitarra de Francisco Muñoz se arrancaba por bulerías.
A la lectura del pregón asistieron numerosos aficionados y personalidades como el concejal de Cultura y Festejos del Ayuntamiento de Murcia, Rafael Gómez; el empresario de la plaza de toros de Murcia, Ángel Bernal; y el decano del Colegio Oficial de Periodistas de la Región de Murcia, Juan Antonio de Heras, que este año cobra especial protagonismo por el centenario de la Corrida de la Prensa.
Pero, sobre todo, numeroso público congregado en el salón de actos de Cajamurcia que confirmó que el pregón taurino «se está consolidando y contribuyendo a que la Feria de Murcia sea cada vez más conocida y reconocida», como dijo Alfonso Avilés, presidente del Club Taurino, institución que ha impulsado la celebración de este acto que precede a los días de toros en la capital murciana.
El afamado guitarrista Carlos Piñana ofreció un mini-recital para terminar una noche sin duda inolvidable para todos.
La Feria Taurina de Murcia ya está anunciada. Ahora toca disfrutarla.